Un recorrido histórico por los momentos más importantes en el desarrollo del Aikido, desde sus orígenes hasta su llegada a Argentina.
Nace Morihei Ueshiba en Tanabe, Wakayama, Japón. Futuro fundador del Aikido.
Ueshiba se alista en el ejército japonés y sirve en la Guerra Ruso-Japonesa.
Ueshiba conoce a Sokaku Takeda, maestro de Daito-ryu Aiki-jujutsu, quien se convierte en su principal maestro de artes marciales.
Ueshiba conoce a Onisaburo Deguchi, líder espiritual de la secta Omoto-kyo, quien influye profundamente en su desarrollo espiritual.
Ueshiba experimenta una profunda revelación espiritual que marca el nacimiento conceptual del Aikido como arte de paz.
Ueshiba se muda a Tokio y comienza a enseñar su arte marcial a estudiantes selectos.
Se establece el Kobukan Dojo en Tokio, que se convierte en el centro principal de entrenamiento.
El arte marcial de Ueshiba es oficialmente registrado con el nombre 'Aikido' por el gobierno japonés.
Se establece la Fundación Aikikai como la organización oficial para promover el Aikido.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el Aikido se reabre al público en general.
Koichi Tohei realiza la primera demostración de Aikido fuera de Japón, en Hawái.
Masamichi Noro introduce el Aikido en Francia, marcando el inicio de la expansión europea.
Muere el fundador del Aikido a los 86 años. Su hijo Kisshomaru Ueshiba asume el liderazgo del Aikikai.
El Aikido comienza a expandirse por América del Sur, incluyendo Argentina.
Se establecen los primeros dojos oficiales de Aikido en Argentina, principalmente en Buenos Aires.
Se forma la primera asociación nacional de Aikido en Argentina para coordinar la práctica y enseñanza.
Muere el segundo Doshu del Aikido. Su hijo Moriteru Ueshiba se convierte en el tercer Doshu.
El Comité Olímpico Internacional reconoce oficialmente al Aikido como deporte.
UNESCO considera incluir el Aikido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
La pandemia acelera la digitalización del Aikido con clases online y plataformas virtuales como Aikido.ar.